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Narró Bujari y Muslim de Anas bin Malek, que Allah esté complacido con él: Abu Talha tenía un hijo que estaba enfermo. [Abu Talhah estaba muy molesto y angustiado por la enfermedad del niño] Una vez, mientras Abu Talha estaba fuera, el niño murió. [Umm Sulaim (la madre) lavó al niño, lo amortajó y lo acostó. Ella les dijo a las personas en la casa: “No le digan a su padre que murió antes de que yo se lo diga”] Cuando Abu Talha regresó a casa [junto con algunos de sus amigos de la mezquita], preguntó: “¿Cómo está mi hijo? Umm Sulaim respondió: "Está más tranquilo que nunca". [Su esposo lo interpretó como que la condición del niño había mejorado.] Ella trajo la comida y todos cenaron, [entonces los invitados se
Refugiarse en Al-lah, el Uno, el Único, mediante el du’a y la entrega en humildad a Él es la base de la adoración, en especial cuando ocurren epidemias y calamidades.
Muslim narró de Ubayy bin Ka'b que dijo: El Mensajero de Allah ﷺ me preguntó:
"Abul Mundhir (este es el Kunya de Ubayy), ¿sabes qué verso del Libro de Allah es el más grande?" Respondí: “Allah y Su Mensajero saben más”. Volvió a preguntar: “Abul Mundhir, ¿sabes qué verso del Libro de Alá es el más grande? Dije: “¡Alá! No hay dios ˹ digno de adoración ˺ excepto Él, el Siempre Vivo, Todo Sustentador” (Corán: 2: 255) Acto seguido me golpeó en el pecho y dijo: “¡Que te regocijes con este conocimiento, oh Abu Mundhir ! "
