Buscar
Recompensas de la Oración
Cuando uno establece la oración (Salah), se beneficia de las siguientes maneras:
1) Alegría espiritual: el Salah establece una relación entre el siervo y Allah. Es una “conversación” privada con él, suplicándole con sincera humildad.
2) Paz en el corazón y tranquilidad. El Profeta Muhammad dijo:
“Las mujeres y el perfume me son amados, y el Salah es una delicia para mis ojos”. (Mustadrak al-Hakim)
3) El Salah previene al musulmán de cometer pecados y malas acciones. Dios dice:
(ciertamente la oración preserva de cometer actos inmorales y reprobables. ) (29:45)
4) El Salah fortalece los vínculos de amor y unidad entre los musulmanes, elimina toda diferencia social que pueda existir entre ellos: todos se paran lado a lado en filas, los jóvenes y los ancianos, los ricos y pobres, los de poder y los que no lo tienen. Toda la gente es igual, humildes ante Allah, orientándose en la misma dirección (la Qiblah[1]), realizando las mismas acciones, recitando lo mismo, todo en el mismo tiempo.
[1] Qiblah: la dirección a la Ka’bah, en la ciudad de Meca.