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El Mayor Signo de la Profecía
Entre los mayores signos de la Profecía de Muhámmad ﷺ está el noble Corán. En él Alá U desafía a todas las personas, hasta el Día de la Resurrección, a producir algo semejante. Dijo:
“Si dudáis de lo que le hemos revelado a Nuestro siervo [Muhámmad] traed una sura similar, y recurrid para ello a quienes tomáis por socorredores en lugar de Aláh, si es que decís la verdad”
(2:23)
“Entonces traed vosotros [si podéis] una Sura similar y recurrid para ello a quienes tomáis por socorredores en vez de Aláh, si es que decís la verdad”
(10:38)
Ibn al-Yawzi declara que el Corán es inimitable en varias formas:
En Su elocuencia, precisión, concisión y amplitud. Una historia puede ser relatada en toda su extensión y luego repetida en forma resumida sin perder nada de su substancia.
En su diferencia con los estilos de prosa y poesía que eran usados por los árabes. Ellos fallaron en sus esfuerzos para imitarlo y reconocieron la superioridad del Corán. Al-Walid ibn al-Mughirah admitió: “Por Alá, en verdad, éste libro tiene una dulzura y una gracia inimitable.”
En su información acerca de las naciones previas y de los Profetas quienes son conocidos por los judíos y los cristianos, aunque el que lo transmitió no sabía leer ni escribir, ni se había reunido con monjes ni clarividentes. De hecho, aquellos árabes que podían leer y escribir y sí se habían reunido con eruditos, no conocían la información contenida en el Corán.
En su información acerca de eventos no conocidos del futuro, lo cual representa una evidencia bien definida, dado que lo que éste declaró probó ser cierto. Para ilustrar: A los judíos se les dijo:
Está libre de inconsistencias y contradicciones. Alá U dijo:
“¿Acaso no reflexionan en el Corán y sus significados? Si no procediera de Alá habrían encontrado en él numerosas contradicciones”.
(4:82)
Y dijo:
“En verdad Nosotros hemos revelado el Corán y somos Nosotros sus custodios”.
(15:9)
“Si creéis que el Paraíso de Alá es exclusivo para vosotros, entonces desead la muerte si sois veraces”.
(2:94)
Luego Alá U dijo:
“Pero no la desearán nunca por lo que cometieron, y Alá bien conoce a los injustos”.
(2:95)
Y le dijo a la gente: “Si dudáis de lo que le hemos revelado a Nuestro siervo [Muhámmad] traed una sura similar, y recurrid para ello a quienes tomáis por socorredores en lugar de Aláh, si es que decís la verdad”.
(2:23)
luego dijo:
“Si no lo hacéis, y por cierto que no podréis hacerlo, guardaos del fuego que ha sido preparado para los infieles y cuyo combustible serán hombres y piedras”.
(2:24)
Y dijo:
“Di a los incrédulos: Seréis vencidos y congregados en el Infierno. ¡Qué pésima morada!”
(3:12)
y fueron superados. El Corán también dijo:
“Por cierto que Alá hará realidad la visión que tuvo Su Mensajero [en sueños] y entraréis en la Mezquita Sagrada, si Alá quiere, algunos con las cabezas rasuradas y otros con el cabello recortado, sin temer absolutamente nada. Alá sabe y vosotros lo ignoráis; y Él os concederá además, una victoria cercana”.
(48:27)
Y entraron.
Dijo acerca de Abu Lahab:
“Será arrojado en el fuego llameante. Y su mujer [también será castigada] portando leña [por haber puesto espinas en el camino que transitaba el Profeta]. Y en su cuello tendrá una cuerda de fibras de palmeras”.
(111:3-5)
Esta fue una declaración de que ambos morirían en estado de incredulidad, y eso fue lo que sucedió.
Abu Hurairah t narró que el Profeta e dijo:
“No hubo Profeta entre los [antiguos] al que no le fuera dado signos (milagros) en los cuales la gente creía. Y en verdad, a mí me fue dada una revelación de Alá. Espero ser el que tenga más seguidores el Día de la Resurrección.”
(Al-Bujari y Muslim)
Ibn `Aqil dijo: “Algo que muestra que el Corán es inimitable es que nadie puede citar de él un verso cuyo significado fuera tomado de escrituras previas, mientras que las personas continúan aprendiendo cosas unos de los otros. Como es dicho: “Al-Mutanabbi tomó de al-Bohtari.”
Ibn al-Yawzi dijo: “He deducido dos significados importantes.
Primero: que los milagros de los antiguos Profetas cesaron con su muerte. Entonces si un ateo dijera hoy: ‘¿Qué prueba hay de que Muhámmad ﷺ y Moisés u eran verdaderos Profetas?’ y se le dijera: ‘La luna fue dividida para Muhámmad ﷺ y el mar fue dividido para Moisés u‘ él diría: ‘Eso es imposible.’ Por eso Alá U hizo de este Corán un milagro para Muhámmad ﷺ que permanece por siempre, lo cual muestra su veracidad luego de su muerte así como aquella de los Profetas anteriores, dado que él confirmó su mensaje y dio información acerca de ellos.
Segundo: el Corán le informó a los judíos y a los cristianos que la descripción de Muhámmad r estaba escrita en la Tora y en el Evangelio. También testificó sobre la fe de Hatib y de la inocencia de `A’ishah, los cuales son testimonios acerca de cosas ocultas. Si su descripción no hubiera sido encontrada en la Tora y en el Evangelio estos testimonios hubieran sido objetables para ellos, y si `A’ishah y Hatib hubieran sabido de ellos mismos algo diferente a lo que estaba declarado sobre ellos el Corán, hubieran renunciado a su fe”